EN LUGAR DE LOS SUEÑOS
EN LUGAR DE LOS SUEÑOS
Para la mujer que escribe poesía.
Por Antonieta Villamil
Trepadora de muros y arquitecturas vacilantes. Cazadora de incansables revuelos del viento entre las ramas. Perseguidora de los fantasmas de hojas que anuncian huracanes de polvo y espectros de partículas expuestas al sol calcinante de medio día.
Fielmente desentendida y voluntariosa.
Suele caerse del árbol desde altas ramas, después de indagar largamente territorio de pájaros. Al caer poco más o menos aparatosamente, suele perder una palabra como si fuera una vida, o quizás, acierta que para descifrar, tiene que desplomarse de un árbol de mango en medio del verano, causando alboroto de lástimas entre el vecindario, porque le es inherente cazar letras, como a lagartijas rosadas entre satín pegajoso de girasoles.
Imagina que al caer sufre un extraño cambio.
Enviar un comentario nuevo